Contar con referentes femeninos es primordial para promover la igualdad de género. Son modelos que impulsan el empoderamiento femenino y la diversidad de talentos y voces.
Los referentes femeninos son aquellas mujeres que se destacan en diferentes ámbitos de la sociedad. Son mujeres que sirven de inspiración y ejemplo para otras mujeres y niñas.
Las historias de las mujeres en que nos centraremos, forman parte de un fenómeno que tiene un gran potencial. Un fenómeno que contribuye con el desarrollo económico, social y ambiental de las zonas despobladas o en riesgo de despoblación: el emprendimiento liderado por mujeres rurales.
Mujeres rurales que impulsan la economía
Estas mujeres lideran iniciativas que nacen en un medio rural de España. Mujeres que se han enfrentado a la situación actual del emprendimiento femenino rural en el país y en el mundo.
Son mujeres rurales que se han convertido en casos de éxito, que forman parte de una muestra que es necesario visibilizar. Se hace fundamental valorar el trabajo de las mujeres emprendedoras rurales y fomentar su reconocimiento como referentes femeninos.
Es en la fuerza de estas historias de mujeres emprendedoras en el ámbito rural donde empieza a nacer el quiebre a los retos que enfrentan. La superación de la brecha de género en el acceso a la financiación, el entorno, los estereotipos y roles sociales.
Empresaria: María del Mar Pérez Muñoz
Una experiencia desafortunada llevó a María del Mar a trasladarse a las Aldea Casas de Pradas (Venta del Moro), junto a su hija y esposo. Al encontrarse incapacitada, se refugió en el amor por la música, en su talento nato por crear mezclas como mecanismo de apoyo para su recuperación.
Esta habilidad autodidacta la hizo formar Discomoviles Music & Events DJ Mari hace 9 años. Empresa que se dedica a la sonorización y la iluminación de eventos y celebraciones, con una propuesta de deejay que ofrece música variada y animación.
En el 2020, con el inicio de la Pandemia, su creciente negocio se vio afectado. La disminución en la realización de eventos por las medidas de bioseguridad del COVID-19, trajeron bajas económicas. Sin embargo, María del Mar no se dio por vencida.
Ante la dificultad, visualizó otra oportunidad. Generó otro emprendimiento, está vez dirigido a prestar servicios de mantenimiento, al que llamó Servicios Integrales Maria del Mar. Su segundo negocio ofrece limpieza y cuidado de las aldeas aledañas, pintura, fontanería, albañilería, entre otros servicios.
En la actualidad, María del Mar dirige sus dos empresas, mantiene una agenda activa con Discomóviles y atiende 4 aldeas aledañas, incluyendo hotelería con Servicios Integrales. Además, su pasión por la música la ha llevado a ser artista emergente en la radio online a nivel mundial.
María del Mar reconoce que ha tenido que superar los desafíos con trabajo duro y la capacitación que le han proporcionado a través de Omunur, Rurable y Turia Calderona. Sus virtudes la han llevado a tener constancia, mientras “te van dando oportunidades, tuve que tener mucha paciencia y saber estar, ir escalón a escalón”.
Además, considera que es primordial que “las mujeres debemos luchar y trabajar, demostrar 3 veces, para que nos den el valor que merecemos en la mayoría de los casos, pero eso nos hace ser mejores”.
Artesanía del Esparto: Simone Simons
Simone es una artista que se dedica a la escultura contemporánea y la artesanía del esparto. Vive y trabaja en Chelva desde hace 24 años y expone su trabajo internacionalmente. Sin embargo, no siempre residió en el mundo rural.
Para esta mujer artesana, cambiar la ciudad por el ámbito rural contribuyó con la motivación para ejecutar su trabajo. La belleza de su entorno, la relación con la naturaleza y su interés por la artesanía local la inspiró para crear Trendzadesign.
Como fundadora de este emprendimiento, Simone ofrece productos realizados con esparto, como bolsos, cestas y alfombras. Además, cuenta con talleres de formación y experimentación con fibras vegetales, contribuyendo a “enseñar el oficio y sus posibilidades a futuros diseñadores y/o artesanos”.
Su proyecto contribuye con la conservación de la cultura y el patrimonio local, así como a la dinamización económica y social de la zona. Sin embargo, requiere de trabajo y esfuerzo diario. Su jornada incluye 6 horas de trabajo en taller y el resto en tareas administrativas.
Frente a los desafíos del ámbito rural, Simone desea “llevar esta artesanía y el material al mundo contemporáneo”. Convive con la realidad, un entorno donde la participación masculina es mayor, donde “ha sido siempre el hombre, la persona visible en la artesanía del esparto en el siglo 20”.
Ante la invisibilidad de la mujer, tiene su propia vía de resolución con su empresa. Entre sus metas y planes está: “Ampliar la enseñanza y seguir con nuevas líneas de diseños propios que espero que mejoran cada año y tendrán reconocimiento”.
De igual forma, desea conservar su trabajo como referente femenino para las siguientes generaciones. Tiene planteado desarrollar “algún libro más sobre el diseño rural, sobre piezas tradicionales con un gran valor artístico”.
Cocina Energética: Agnès Pérez
En la comunidad de Castellonet de la Conquesta (Valencia) vive y trabaja Agnès Pérez, mujer rural que gestiona sola la escuela macrobiótica Ca l’Agnès. En esta escuela rural, combina la docencia en cocina energética, alimentación saludable y ecológica, adaptada al medio mediterreneo con cursos online y presenciales.
Para Agnès el mundo rural siempre ha estado presente en su corazón. Se crió en las afueras de un pueblo en Altea con sus padres, luego se fue a estudiar en Valencia. Se matriculó como Técnico en Empresas y Actividades Turísticas, prolongando su estancia allí por 14 años.
Durante este tiempo, la necesidad de sostener una conexión con el mundo rural estuvo presente. Razón que la lleva a estar en continuo viaje entre la ciudad y el ámbito rural. Formándose y creciendo, con un proyecto a cuesta, hasta que fija como destino Castellonet de la Conquesta.
El proyecto “nómada” de Agnès es consecuencia de la internalización de una mejora en su propia alimentación. Al llevarla a cabo, desde un entorno rural con alimentos 100% entregados de la tierra, decide aumentar su formación en nutrición y dietética, comida macrobiótica, entre otros.
Con una nueva conciencia, Agnès inicia un pequeño blog con la información que le trajo beneficios. El contenido de su blog fue tan valioso, que su web recibe millones de visitas. Sin embargo, también fue uno de los mayores desafíos que enfrenta al inicio.
La información de macrobiótica online que eligió compartir le fue copiada tanto por profesionales de su misma área, como por empresas de alimentos ecológicos. Sin embargo, esto no detuvo sus esfuerzos y a la par, fundó su escuela.
Ca l’Agnès es un espacio que le permite dictar clases y continuar con la esencia de su proyecto: abrir las puertas de la casa y compartir su forma de vida. Eligiendo dar clases con perspectiva ecofeminista en una casa de campo y de pueblo, no en un local.
Sin embargo, las restricciones del COVID-19 también le trajeron repercusiones, en un momento donde su motivación y el crecimiento del proyecto estaba en la cúspide. Al ver interrumpidas sus clases presenciales, se encuentra con el desafío de la digitalización online.
A pesar de su desconocimiento en estas áreas, busca asesoría en todo lo desconocido. Logrando así, que sus cursos puedan ser ofrecidos de manera online, con asistencia personalizada a través de Zoom.
Agnès admite que el camino del emprendimiento es difícil, y que lo es en cualquier entorno. Pero es muy gratificante para ella hacerlo en el ámbito rural, su medio, entorno que le ha permitido un gran crecimiento y aprendizaje.
Para las mujeres que desean incursionar en el emprendimiento en el ámbito rural, tiene un consejo: “sigan su corazón, si quieren estar en el ambiente rural y sienten que ahí es, que vayan”. También les deja la recomendación de estudiar bien el entorno, el pueblo y sus características internas.
Pero sobre todo, destaca que lo importante “es que hagan números”. Esta mujer emprendedora resalta lo valioso de trabajar en positivo, con resiliencia y reinvención. Con el énfasis puesto en la concentración y el equilibrio de mente y cuerpo.
Conclusión
Maria del Mar Pérez, Simone Simons y Agnes Pérez son ejemplos de mujeres que han sabido emprender y liderar negocios exitosos en el ámbito rural de España. Cada una de ellas ha apostado por un sector diferente.
La música, el esparto y la macrobiótica son los tres sectores en los que estas mujeres rurales se han diferenciado. Demostrando así, que hay muchas posibilidades de desarrollo en el medio rural y que con mayor apoyo, podría llegarse aún más lejos.
Estas mujeres han enfrentado desafíos como la falta de recursos, la competencia o la discriminación, pero también han contado con el apoyo de sus familias, comunidades y redes. Su visión, creatividad y perseverancia las convierten en referentes femeninos para otras mujeres rurales que quieren seguir sus pasos.